domingo, 29 de octubre de 2017

Relato Nº3 "Rostro de Jesus"

“Rostro de Jesús”


Sucedió  en el año 1987 aprox. un día  Sábado o Domingo, no recuerdo la fecha exacta, solo que en ese momento mi madre estaba muy enferma,  los médicos no tenían claro el diagnostico, como niños sabíamos que estaba con problemas de salud, pero  sentíamos tanto  la protección de la familia en general, que no nos dábamos cuenta de la gravedad. Estábamos en la casa de mis abuelos maternos  (Jose y Elsa), en la calle Pacifal en la comuna de San Miguel, Santiago. Chile.

 Todos los domingos sagradamente, visitábamos  a mis abuelos paternos como maternos  por esas causalidades de la vida eran vecinos desde que mis padres tenían 18 años. En aquella ocasión mi madre estaba acostada  con dolores muy grande en su estomago, mi papa y mi tía Verónica ( hermana de mi madre),   trataban de cuidarla de la mejor manera posible, mientras con mi hermano jugábamos en el pasillo de la casa, éramos niños bien portados  sin molestar a mis padres,  ambos nos divertíamos  corriendo en el pasillo, pero  en una milésima de segundos  algo nos llamo la atención… miramos  en la parte superior de la ultima puerta del pasillo  específicamente en el techo,  y lo que vivos fue sorprendente,  maravilloso y extraño , vimos como emergía el “ROSTRO DE JESUS”  desde el techo con una sonrisa mirándonos,  al instante  gritamos ; “ ¡Es el Tatita Dios! ” (Así nombrábamos a JESUS cuando niños) mi tía nos observo nuestro extraño comportamiento y cuando escucho lo que dijimos, se puso a llorar desconsoladamente, abrazándonos y tratando de ver aquel rostro, pero  no observo nada.  Para nosotros como niños fue algo normal, es como si hubiéramos visto a un tío o amigo muy cercano.

Los siguientes días, la enfermedad de mi madre desapareció sin explicación de la misma forma como apareció, el médico no tuvo explicación científica de lo sucedido, solo señalo que pudo haberse tratado  de  un stress, aun así no se explica el fenómeno.

Este acontecimiento fue hablado por mi familia esporádicamente, también lo relatado por mi Padre en el año 1974 dan señales que la esencia de JESUS Cristico ha estado presente  desde mucho tiempo y a través del mensaje dado a mi padre, es probable que estemos ayudando a emitir más luz en este mundo  , para mí en particular partió  por  un interés en la vida de JESUS  en su enseñanzas y vida, nunca he ejercido una religión,  pero si surgió  el tema del crecimiento  espiritual,  abarcando todas las tradiciones  del mundo, sin embargo mis lecturas siempre han estado orientadas en la vida de  JESUS,   ejemplos de ellos son los siguientes libros que he leído  y algunos  relatos de mi maestro “ Willy” que comparto; los Evangelios  apócrifos  por ejemplo:  “ El evangelio de Tomas” , “ los evangelios de los Esenios y Gnósticos”, “ El evangelio de la Paz”;  la mediumnidad o canalización en los hermosos libros de Ramatis ; “El Sublime Peregrino”,  la descripción de cada parábola escrita e interpretada por Yogananda en su libro “ El Cristo Interior”,  la visión de mi Maestro Willy Segovia quien nos describió el detalle de la vida de JESUS , sus sanaciones a través de la practica y  mucho mas  etc..  Cada vez surgen menos dudas de quien fue  y la razón de que  viniera  a este mundo de caos y placer, creo que a pesar que desde niño no tome mucho en cuenta este acontecimiento, puedo asegurar que hay una causa que esta  mas allá de nuestros cinco sentidos, y tengo la certeza que la ruta que seguimos en la correcta.


Relato Nº2: Dos Carabelas de Oro.

Relato Nº2: Dos Carabelas de Oro.

A mediados del año 1978 vivíamos con Betzabe, en dos piezas nuevas prefabricadas de Madera, en el costado del patio de la casa de mi Padre Miguel. Eran los comienzos difíciles que toda pareja joven debe vivir, porque estábamos luchando, planificando y ahorrando para un futuro mejor, luego de cinco años de matrimonio, en ese pequeño nidito de amor.

Aplicando la austeridad en nuestro devenir, el gran compromiso con el trabajo que nos permitía vivir, ya que sabíamos con Betzabe, que no íbamos a heredar nada material de parte de nuestros Padres, solo lo intangible. En esa época no existía la facilidad económica que se presenta hoy en día, por ejemplo con créditos estables a largo plazo, como es el caso de la Vivienda Propia, Créditos de consumo, Viajes con facilidades y otros. El país venia saliendo de un inédito  episodio, que marco nuestra historia como país para siempre.

Nuestros gustos y disfrutes eran muy bien pensados, gastábamos lo justo y necesario de acuerdo a lo que recibíamos, nunca endeudarnos más allá de nuestras posibilidades económicas. Revisábamos  permanentemente la Libreta de Ahorro Ahorromet y veíamos como nuestro esfuerzo iba creciendo día a día, pensando siempre que si nuestro Dios nos bendecía con hijos, pudiésemos darle lo mejor material dentro de lo posible. El amor hacia ellos no estaba en duda, teniendo siempre presente que esos querubines serian nuestra adoración.
Unos dos años antes de la fecha señalada en este relato, nos pusimos en campaña de formar una familia completa con hijos, no importaba el género, solo que iban a ser nuestros, para coronar nuestra felicidad. Por circunstancias no sé si eran biológicas, psicológicas por ansias, destino, la maternidad no llegaba, estando varias veces Betzabe  esperanzada por algún atraso en el calendario de toda mujer fértil, no siendo concretado el sueño.
Un día domingo compartiendo con mis Padres Miguel y Elena, mi padre nos dice textual:

 “Anoche tuve un sueño muy extraño, pero muy lindo, soñé que estábamos todos los de la familia completa, en un día radiante de Verano y Sol a orillas del mar, muy calmado y de un azul radiante, cuando a lo lejos en el horizonte se empiezan a observar dos barcos que vienen, no eran barcos comunes”, me dice mi Padre,”sino que dos Carabelas una más adelante que la otra. Lo que me llamo la atención es que eran brillantes como el Oro, resplandecientes a pesar de la luminosidad del día y todos estábamos felices y dichosos cuando recalaron en la orilla” concluyo mi Padre.

En él no era muy común que contase sus sueños, sin embargo ese lo impacto de tal manera, que lo expreso abiertamente, con mucha exaltación y detalles.

En ese momento en mi interior sin compartirlo con Betzabe, para no crear nuevamente falsas esperanzas en ella, yo asumí que era una señal de algo grandioso, que la vía fue mi Padre para comunicarla. Tuve la certeza que tendríamos dos hijos, muy cercanos en edad y del mismo género, porque asociando las dos Carabelas descritas del sueño, estas eran iguales y solo venían desfasadas.

Bueno me emociona mucho llevar al papel estos relatos tan propios y únicos, Betzabe quedo embarazada  de Daniel Mauricio en Enero del año 1979, con la dicha inmensa que derrocha aun hoy en día, era el sueño más preciado por nosotros. Luego en un año y medio más nació Fabián Leonardo, teniendo yo la certeza anticipada, que también seria varón. Las ecografías ni planas ni tridimensionales no eran comunes  en la época, o eran vedadas económicamente para la clase media, por esa razón no conocíamos el sexo de nuestros hijos, solo se escuchaba el corazón por medio de un amplificador, adosado a la pancita.
Luego del nacimiento, yo le conté a Betzabe la asociación que hice del sueño premonitorio de mi Padre, con la realidad que estábamos viviendo y claro que abrochaban muchas situaciones, que después de analizarlas tenían mucho sentido y cercanas a la realidad.


Hasta ahora aun existe la interrogante de quien fue el emisor de tan bello anuncio, a través, de mi Padre. Yo en lo particular lo atribuyo a una potestad divinamente superior, que utiliza cualquier medio, para comunicar este tipo de noticias maravillosas.

Relato Nº1 " Seres Inferiores"

Amigos lo relatos que acontinuacion expongo sucedieron dentro de mi familia, son episodios de distintas indoles, espirituales, misteriosos, oscuros, etc.. pero quiero mantener la reserva de la persona que relatara, por lo que solo se indicara con el seudonimo D.M.C

Seres Inferiores. 


A mediados de la década de 1970, para ser más preciso en 1975 estando ya casado, sin hijos, trabajando y estudiando vespertino a la vez, comencé a experimentar situaciones muy especiales y desconcertantes para mí en ese entonces.



Cuando entraba en el conocido sueño REM, a veces solo conectado con mi cuerpo físico, por el llamado Cordón de Plata (conocía la terminología, por ser lector asiduo de Lobsang Rampa) presentía y visualizaba entes inferiores, que querían penetrar y apoderarse de mi persona.

 En dicha fecha la película “Ghost”(1990 - Patrick Swayze y Demi Moore) aun no había sido filmada, sin embargo al verla posteriormente con los años, asocie que lo que muestra la película con esas sombras negras, que se arrastran por las superficies, eran idénticas alas encarnaciones inferiores, que yo visualizaba en mis sueños de entonces.
Nota del Autor.- (Haciendo un alto en este relato, debo confesar que cuesta mucho divulgar estos temas, por lo que pueden provocar en el lector, pasando por el juicio precipitado, o el escepticismo propio ante un tema tan complejo).
Las situaciones relatadas con anterioridad eran  demasiado frecuentes, justamente cuando mas necesitaba descansar tranquilo y relajado. Con mucha Fe oraba en las noches antes de dormir y pedía a mi Padre Dios, que me protegiera de cualquier situación anómala que aconteciera. Por alguna razón, que no la se con veracidad, adquirí una Cadena y una Cruz de Plata muy sencilla, que se tornaron inseparables para mi, siempre adosabas a mi cuerpo.
Presentía yo que el crucifijo me protegía constantemente y ante eso, lo andaba trayendo siempre en mi cuello. Curiosamente el material de que estaba fabricado, era la mejor Plata de Ley 950, sin embargo al poco tiempo (dos semanas) de comenzar a utilizarlo, tanto la cadena como la cruz comenzaron  a obscurecerse, hasta quedar de un feo color negro parduzco muy intenso. 
Mis esfuerzos por devolver al material su color original fueron en vano, ya que con diversos métodos de bañado en Acido caliente y otros utilizados en la limpieza de Joyas, fueron inútiles. Volvía al color original de la Plata y en pocos días estaba nuevamente oscurecido.
Así transcurre un breve periodo de tiempo, cuando un día estando muy consciente y perfectamente despierto, intuyo solo mentalmente en mi interior a un hombre de unos sesenta años, con pelo y barba semi blanca, de túnica antigua tipo romana de color negro y violeta morado (color obispo). Su fisonomía era de rasgos muy finos, muy bonachona, carismático, pero su sonrisa y mirada profunda, distaba mucho de la dulzura o ternura, que podría significar su atuendo y su rostro.
En ese momento, el se comunica conmigo telepáticamente y me dice que debo obedecerle, desde ahí en adelante a sus peticiones. Presiento que no es algo bueno lo que me ofrecía, por la poca confianza que me ocasionaba, su fuerte e imponente  magnetismo y la gran fuerza interior oscura que yo percibía.

La verdad que en cada petición, que este inexplicable ser me hacía, en cualquier momento del día y a cualquier hora, me generaba una constante lucha interior. Lo que me solicitaba era por lo general, el hacer daño y causar sufrimiento a los seres más cercanos, queridos y apreciados por mí  y estos no serían tan solo físicos, sino que incluían un hostigamiento verbal, como  también psicológico.

Nunca atendí a sus siniestras propuestas, sino que siempre luche en mi interior, para no responder a lo que me solicitaba. Era muy insistente en sus pedidas, siempre ahí presente con su iracunda sonrisa, mezcla de sarcasmo y burla. Debo confesar que en reiteradas ocasiones, estuve a punto de ceder, para librarme de su hostigamiento, de una vez por todas, sin embargo siempre salí airoso, no acatando sus desviadas e insólitas peticiones.
Hasta la fecha  no se si lo vencí en sus intenciones, pero paulatinamente fue perdiendo fuerza, sus revelaciones fueron cada vez más escasas, hasta desaparecer por completo de mi vida. 


Uno de los indicativos de ese triunfo, si así puedo llamarlo, fue que mi Cadena y Cruz de Plata comenzaron  lentamente a retomar su color y brillo original, manteniéndose inalterable después en el tiempo.
Hoy siendo un hombre mayor, me siento orgulloso en el buen sentido de la expresión, de haber logrado salir de ese episodio en mi juventud, sin recurrir a nadie externo, sino que solamente con la Fe inmensa profesada a nuestro Señor y el entendimiento, comprensión  y el gran amor incondicional, de mi esposa.

En todo caso desde ese entonces,  llevo siempre colgado a mi cuello una Cadena y una Cruz, que hoy en día son de Color Amarillo en otro tipo de material, pero para mí continúan significando un símbolo bendito de protección, confianza  y que otorgan seguridad. D.M.C.